El Senado de EE.UU. bloquea las importaciones de carne de vacuno paraguaya

El Senado de Estados Unidos ha actuado con decisión para impedir la importación de carne fresca de vacuno procedente de Paraguay, alegando preocupaciones sobre la seguridad y el cumplimiento de las normas agrícolas. Este hecho tiene importantes implicaciones para la industria de la carne de vacuno y las relaciones comerciales de América Latina.

La decisión del Departamento de Agricultura de EE.UU. el pasado mes de noviembre de permitir las importaciones de carne de vacuno paraguaya bajo estrictas condiciones fue recibida con escepticismo en el sector agrario estadounidense. A pesar de las garantías ofrecidas por las autoridades estadounidenses sobre los protocolos de seguridad aplicados, persistían las dudas sobre la idoneidad de los procedimientos de inspección de Paraguay y la fiabilidad de los datos utilizados en las evaluaciones de riesgo.

Encabezada por los senadores Jon Tester (D-Montana) y Mike Rounds (R-S.D.), la acción del Senado subraya la importancia de mantener unas normas a la altura de las observadas por los ganaderos estadounidenses. Tester criticó especialmente la decisión de la administración Biden, citando los riesgos potenciales para la seguridad alimentaria y los productores nacionales.


Formulario de suscripción

El apoyo al bloqueo de las importaciones de carne de vacuno paraguaya ha sido generalizado entre diversas organizaciones agrarias, como la National Cattlemen's Beef Association y la United States Cattlemen's Association. Estos grupos han expresado su preocupación por los antecedentes de fiebre aftosa en Paraguay y su posible impacto en la agricultura estadounidense.

Aunque el voto del Senado, 70-25, a favor de la resolución es un paso importante, su destino final depende de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Si la resolución se aprueba en la Cámara y llega a la mesa del Presidente Biden, existe la posibilidad de veto. Sin embargo, la mayoría sustancial del Senado sugiere una posible anulación, si fuera necesario.

A medida que se desarrolla el proceso legislativo, las partes interesadas de toda América Latina siguen de cerca la situación. Garantizar normas estrictas para proteger los intereses agrícolas y mantener la seguridad alimentaria sigue siendo una prioridad en medio de la evolución de la dinámica comercial en la región.

Respuestas

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *